Este vuestro blog sigue haciendo historia
Tras acreditar el que probablemente sea el estreno más lamentable en el breve trayecto de la bitácora online carpetovetónica, yo, antes que arredrarme, me refocilo y sigo caminando erguido y marcándome un firme Stechschritt hacia la más absoluta de las ignominias.
No se equivoquen: soy plenamente consciente de estar cometiendo todos y cada uno de los errores de manual que existen en esto de los blogs. Desde el inicial e irracional entusiasmo que me lleva a exponer en internet un zurullo de monólogo, pasando por el terror abismal al juicio público aderezado por la ansiedad de la falta de visitas, hasta la desesperación del no saber qué contar en mi segunda entrada, de ser demasiado consciente de que es condenadamente difícil aportar algo original a la blogosfera.
Porque ese es precisamente la maldición de nuestra época: somos demasiado conscientes de todo.
Déjenme decirlo bien alto: SOMOS DEMASIADO CONSCIENTES DE TODO. Somos post-post-post-modernos. Y con tanto cinismo no hay quien aporte una MIERDA.
A pesar de todo ello, voy a atreverme a pedirles algo poco usual en estos círculos: paciencia. Déjenme un ratito para encontrar mi propia voz y quizá sea capaz de contarles algo interesante.
Mientras esperan pueden entretenerse con Alejandro y sus fans.
O escuchar una cancioncilla
No se equivoquen: soy plenamente consciente de estar cometiendo todos y cada uno de los errores de manual que existen en esto de los blogs. Desde el inicial e irracional entusiasmo que me lleva a exponer en internet un zurullo de monólogo, pasando por el terror abismal al juicio público aderezado por la ansiedad de la falta de visitas, hasta la desesperación del no saber qué contar en mi segunda entrada, de ser demasiado consciente de que es condenadamente difícil aportar algo original a la blogosfera.
Porque ese es precisamente la maldición de nuestra época: somos demasiado conscientes de todo.
Déjenme decirlo bien alto: SOMOS DEMASIADO CONSCIENTES DE TODO. Somos post-post-post-modernos. Y con tanto cinismo no hay quien aporte una MIERDA.
A pesar de todo ello, voy a atreverme a pedirles algo poco usual en estos círculos: paciencia. Déjenme un ratito para encontrar mi propia voz y quizá sea capaz de contarles algo interesante.
Mientras esperan pueden entretenerse con Alejandro y sus fans.
O escuchar una cancioncilla
6 comentarios
fnaranjo -
Pero ni se le ocurra dejarlo, que ya le tengo enlazado, ¿estamos?
La Ruina de la Familia -
R. -
absence -
ÁNGEL -
Yo, es lo que hago, no sé
Cuando no me sale nada, es cuando me quiero parecer a los demás
Sea usted mismo
Venga, a por el tercer post Ánimo
REFO -
Lo de los fans acólitos a Amenábar no tiene parangón ¿Cómo ha podido reunir a tanto gilipollas junto? Ni hecho adrede.